“No hay soñador que no se haya quedado corto, ni inquisidor que no haya terminado haciendo el ridículo” Esta frase del escritor español Manuel Vincent es especialmente aplicable al mundo 2.0 en el que vivimos que está en continuo y vertiginoso cambio.
Tal es así que incluso uno de los mayores soñadores que ha tenido el mundo de la informática y durante años el hombre más rico del mundo, Bill Gates, es famoso en la red por frases que se le atribuyen –quizá malintencionadamente– en las que se quedó completamente corto. El fundador de Microsoft dijo en cierta ocasión: «¿Internet? No estamos interesados en eso» y a mediados de los años noventa: “Veo poco potencial comercial en Internet, al menos durante diez años” Obviamente no era consciente de su error y de la velocidad con la que crecería la red de redes, de igual manera que no lo era cuando a principios de los ochenta en los inicios de los ordenadores personales llegó a afirmar: “640Kb. son mucho más de lo que nunca se necesitará de memoria disponible” Hoy simplemente un celular inteligente de los que llevamos en el bolsillo tiene miles de veces mayor capacidad de memoria.
Así pues, si ni siquiera uno de los principales gurús es capaz de anticipar el futuro a corto plazo de las nuevas tecnologías, es muy complicado realizar predicciones (Aún nos parece increíble que una prestigiosa revista de mecánica norteamericana pronosticara en 1949: “En el futuro es posible que los ordenadores no pesen más de 1,5 toneladas”), pero sí me gustaría plantearles, para que sean conscientes de cuáles pueden ser las próximas tendencias y qué nuevas posibilidades de negocio o promoción se abrirán en Internet, una breve lista de cinco de las claves que marcarán el futuro más próximo de Internet y que alterarán nuestra forma de vida cotidiana.
- Internet Móvil: El presente y el futuro inmediato de Internet es móvil. Esta revolución hará que cada vez estemos más conectados y proporcionará un crecimiento en el número de personas con acceso a Internet. Una tendencia especialmente importante para el mundo del marketing y la publicidad que se deriva de un mayor número de accesos móviles es la geolocalización, los servicios de Internet conocerán nuestra posición y se adaptarán a la misma para ofrecernos productos y oportunidades.
- El navegador como centro de uso de los ordenadores y dispositivos. La revolución que supone HTML5, sin entrar en detalles técnicos, hace que navegadores como Chrome de Google no sean ya solo el sistema para acceder a una página web, sino el entorno donde trabajaremos con herramientas de ofimática en la nube, jugaremos a videojuegos o tendremos nuestro centro de ocio.
- Nuevas formas más humanas de interactuar con la tecnología. En los próximos años comenzaremos a ver plenamente cómo nos comunicamos a través de la voz con los dispositivos tecnológicos (algo que ya puede verse en desarrollos como Siri de Apple) en lugar de teclados y ratones y además gracias a los desarrollos de la web semántica (Como el presentado por Google, Knowledge Graph) comenzaremos a “conversar” con las máquinas en un lenguaje humano. Así Internet podrá darnos respuestas precisas a preguntas como ¿Qué tiempo va a hacer el viernes? ¿Dónde tengo que enviar mi declaración de impuestos? O ¿Qué hay en la televisión esta noche?
- Ropa inteligente y conectada. Tras la revolución móvil que está ya consolidándose, el siguiente paso es llevar Internet y las nuevas tecnologías a aquello con lo que nos vestimos (wearables), no ya solo el reloj con GPS y pulsómetro o las zapatillas para correr con chips, el futuro nos traerá sistemas avanzados como las gafas que ha desarrollado Google que nos permitirán simplemente levantando un poco la mirada manejar toda la información sobre nuestro entorno o tejidos o lentillas que monitorizarán nuestra salud en tiempo real.
- Internet ¿abierta o cerrada? La última de las claves no es una afirmación, sino una pregunta. Estamos ya viviendo un proceso de lucha entre los intereses de determinados grupos empresariales y algunos gobiernos por controlar Internet y la de millones de ciudadanos por abrirla cada vez más y crear sistemas de gobierno abierto y otros que empleen Internet para controlar la gestión pública y privada y para convertirla en un centro libre y gratuito de compartición del conocimiento. Proyectos como ACTA, SOPA y PIPA amenazan la neutralidad y libertad de Internet tal y como la conocemos. Habrá que ver la importante evolución de todo esto en los próximos años, pero apuesto a que volveremos a tener múltiples inquisidores haciendo el ridículo intentando ponerle puertas al mar. Internet será lo que, nosotros, sus usuarios, hagamos (y dejemos a nuestros representantes) hacer de ella.
provokatsia einai xalaroste :-)Epitelous oi amdroioi prepei na asxolithoun sovara me thn evrizonikotita sto nisi.To sima dinete asirmata apo thn paro kai oute kan kalodiaka.